Atrás
22/05/2025
Durante las vacaciones de Todos los Santos, pasamos una semana en el hotel Atrium Prestige, y he aquí nuestras impresiones.
Originalmente habíamos planeado este viaje para las vacaciones de Semana Santa, pero por motivos personales no pudimos ir y tuvimos que posponerlo hasta las vacaciones de otoño.
Estábamos un poco preocupados por el tiempo a finales de octubre en Rodas y fue nuestra primera sorpresa agradable: ¡el mercurio oscilaba entre 21 y 26 grados todos los días! Perfecto para nuestro hijo Achille y mi marido, a los que no les gusta el calor. La segunda sorpresa fue la belleza del lugar. Las fotos disponibles en la web no reflejan en absoluto la magia del hotel.
La arquitectura, la vegetación, las vistas al mar… Todo es realmente encantador. Incluso hay una pequeña capilla típica griega junto a la piscina. Es muy agradable pasear a la sombra de los olivos o por los numerosos senderos floridos.
El hotel está a escala humana, lejos de los complejos turísticos impersonales. Es agradable y tranquilizador. A veces dejamos que nuestro hijo pasease solo. Hablando de seguridad, aprecié la presencia de un socorrista en la piscina, incluso durante este periodo de baja ocupación.
El club infantil está situado en un verde jardín frente al mar. Nuestro hijo, aficionado al fútbol, iba allí todos los días a jugar al balón, ya que se había instalado una portería en el césped. En el jardín del club infantil, se ha construido un pasadizo secreto que da acceso a un gran parque infantil. Justo al lado del club infantil, hay una agradable piscina cubierta climatizada reservada a las familias. Allí vimos a menudo a padres con cochecitos y bebés. El personal del club infantil, como muchos otros miembros del personal, habla francés, lo que es estupendo.
El sitio ofrece vistas al mar, pero el terreno no es demasiado empinado. Es fácil desplazarse con niños y carritos de bebé. También hay ascensores que te ayudan a llegar a la playa. Disfrutamos mucho de nuestras partidas de minigolf, ping-pong y ajedrez gigante.
La playa no es de arena blanca y ancha, pero es agradable para bañarse y el lugar es bonito. Para bañarse en el mar, se ha diseñado un pasillo con fondo sin piedras. Las pocas piedrecitas no hacen daño a los pies y un bebé puede jugar en la arena sin problema. Si se siente a gusto, en la tienda del hotel venden chanclas de baño (11 euros). En esta tienda se venden un montón de juguetes y productos (crema solar, pañales, etc.) que vienen muy bien cuando se viaja con niños. El mar es poco profundo y muy tranquilo, así que los niños pueden disfrutar sin peligro.
Habíamos elegido el paquete todo incluido, que también nos daba acceso a los restaurantes a la carta. Enhorabuena a los distintos chefs: como suele ocurrir en Grecia, la comida era excelente.
Durante mi estancia, disfruté especialmente de las actividades deportivas diarias, como yoga y aquagym. El gimnasio es grande y está muy bien cuidado, al igual que el spa marino. Hay que tener en cuenta que los menores de 12 años no pueden acceder al spa ni a la piscina cubierta de agua de mar.
Los precios de los tratamientos son muy razonables, con 70 euros por un masaje relajante de 50 minutos. También me hice la manicura y el secado para volver a casa con un aspecto precioso, y quedé muy satisfecha con el resultado.
Durante nuestra estancia, visitamos el casco antiguo de Rodas (1h30 en coche) y el típico pueblo de Lindos con sus casas blancas (30 minutos). Los alrededores están llenos de preciosas calas, monumentos históricos y paisajes que bien merecen una visita.
Para resumir nuestra estancia en pocas palabras, sólo puedo recomendar este magnífico hotel, que nos sorprendió gratamente por la calidad de sus instalaciones y su servicio, ¡por un precio muy razonable!
Algunos consejos finales:
– Alquile un coche en el hotel (50 euros/día para un coche urbano) y visite el encantador pueblo de Lindos, a 35 minutos.
– Visitar la acrópolis de Lindos, santuario de la diosa Atenea.
– Alquile un barco sin licencia (250 euros/día para una embarcación de 6 personas) en la playa de Kalathos (a 30 minutos del hotel) y explore las calas de los alrededores.
– Visitar el centro histórico de Rodas. Este lugar tan bonito se encuentra a 1h30 del hotel, pero está cerca del aeropuerto, por lo que se puede aprovechar el trayecto para visitarlo.
CONTÁCTANOS
Lunes-Domingo: 9AM - 6PM.
(4,9)
© 2025 Little Guest SA